creando una historia (Jane)

Asenti tambien ya que al parecer aprobaba mi idea. Me quite la chaqueta, me acomode el pelo, y me pinte un poco los labios con una pintura que mi hermana habia colocado en mi bolso, ella siempre hacia lo mismo, sabia que a mi no me interesaban esas cosas. En fin trate de ponerme un poco mas sexy.
Me acerque a el lentamente, caminando a paso humano y tratando de no pensar en nada. Lo mire con cara tierna y le dije- Hola guapo, que haces aqui tan solo?- me daba un poco de asco ver su rostro pero debia de soportarlo por Jane.
Hola hermosa, que haces vos por aca?, este no es el lugar de mujeres tan lindas como vos- sus ojos eran de libidinoso, me desnudaba con la mirada y eso me repugnaba aun mas.
-Estoy buscando algo de diversion, y creo haber encontrado al hombre perfecto- dije y me sente en su regazo.
Claro nena, aqui te vas a divertir a lo grande- y me beso. Lo soporte con demasiada fuerza.
-Me gustaria ir a un lugar mas privado- le susurre al oido, y eso parecio excitarlo porque rapidamente me quito de encima y se levanto.
Le hice una seña que solo Jane podria entender, una seña de que ya habia caido.

El muy bastardo tenia como una habitacion tipo bulo detras del bar. Esperaba no tener que llegar a hacer cosas de las que me arrepintiera. En ese momento pense en Damian, que diria si supiera que estaba en esta situacion y que quizas debia hacer cosas indeseadas para poder ayudar a la niña. Seguramente estaria de mi lado y no le importaria.
Entramos en la pequeña habitacion, habia una cama de dos plazas, una mesita de luz y un par de sillas junto a una mesa ratona en la cual habia varias botellas de alcohol.
Me habia percatado de que Jane se acercaba sigilosamente por lo que miraba con mas atencion al hombre, esperando que no se diera cuenta de nada.
Me acerque al suujeto y le susurre- que bonito cuarto, a cuantas habras traido aqui- sonrei aunque por dentro me daban arcadas.
- A ninguna tan linda como tu- me respondio y me acaricio la mejilla.
Necesitaba pensar en como iba a comenzar a cuestionarlo, me hubiera gustado hablar con Jane para saber como arrancar antes de llamarla. Me sente en una de las sillas y servi dos tragos mientras pensaba que podia hacer.

No iba a permitir que Maggie tuviera que soportar al tipejo aquel de manera tan cercana. Al fin y al cabo podíamos deshacernos de él sin problemas… sólo que quería hacerlo confesar. Entré de repente en la habitación, sorprendiendo al tipo que acababa de aceptar una copa de manos de Maggie.
—¿Todo bien teniente Irlanda?
El tipo nos miró a las dos y amagó mover una de sus manos hacia la cintura. Maggie fue más rápida… definitivamente más rápida. Consiguió quitarle un pequeño revolver calibre 22 y me la arrojó asintiendo, como respuesta a mi pregunta.
—Supongo que nuestro amigo está cooperando contigo en su declaración… al menos eso parece por la intimidad que te ha dado. —lo dije con ironía, remarcando la última frase.

Me relaje un poco al ver a Jane entrar en la habitación. Sabia que no corría peligro pero no quería llegar a mas con el.
Después de arrojarle el arma a mi compañera me puse de pie y deje la copa. Ya no hacia falta fingir. Tome al sujeto por los brazos y lo senté en la silla, sonriendo al comprobar su expresión de susto.
-Recién estábamos comenzando, pero que bueno que te sumas. Justo ahora nuestro amigo nos iba a contar que sucedió exactamente con la niña que estamos buscando, te suena el nombre Gianna? - se veía extrañado, pero cambio el semblante con una rapidez especial. Al parecer se dio cuenta muy rápido de quien hablábamos. Se hizo el sorprendido pero a nosotras no nos engañaba, eramos mil veces mas rápidas y astutas que el.
-Habla ahora gordo si no quieres terminar en una sanja- le dije mientras le apretaba el brazo y el gemía de dolor.

Luego de que Jane hablara con Dani comprendi que la situacion era grave de verdad. El tipo este se habia metido en un lio grande.
Mientras Jane lo apretaba un poco mas tratando de sacarle informacion yo hice mi parte. Comence a revisar la habitacion buscando alguna pista que nos facilitara la busqueda. El sujeto cada tanto me miraba con preocupacion, eso me daba la idea de que habia mas cosas que las que necesitabamos, pero si eso ayudaba a encontrar a mas personas seguiria buscando.
Abri un armario que tenia a un costado de la cama y ahi habia unas carpetas las cuales contenian papeles con fotos de diferentes mujeres, en realidad de niñas. Este tipo si que era un prvertido.
Jane, mira creo que esto te puede interesar- le dije acercandome a ella. El tipo se estaba poniendo morado por lo que le hice una seña para que lo soltara. Si se moria ya no nos serviria de nada.

Maggie me tendió la carpeta mientras el gordo hacía una mueca intentando volver a respirar con normalidad.
―Pervertido...
La carpeta era un verdadero asco, niñas de máximo seis o siete años de edad, maquilladas como muñecas y rodeadas de un escenario barroco adornado de juguetes de peluche mezclados con juguetes de sex shop.
―Hay algo que no me cierra Maggie... más allá de la idiotez pervertida y asquerosa de este tipo... ¿porque Gianna vendería a la niña? o sea... en seguida advertirán que no es "normal".
Tampoco quería dar muchos detalle delante del hombre aquel.

Escuche a Jane mientras seguia buscandoo evidencias. Luego la mire sin saber demasiado a lo que se referia, ella no me habia especificado todo el asunto, pero intentaba atar cabo con las pocas palabras que mencionaba. Ya que de otra forma el gordo se enteraria de nuestras sospechas.
No lo se... pero debe de tener una buena razon, la encontraremos para preguntarle que es lo que sucede.- le dije y cvolvi a mi lugar ya que habia revisado todo y no habia encontrado mas datos.
Me acerque al sujeto y le dije- asique te gusta jugar con las niñas indefensas verdad?- me repugnaba la gente como el - te gustaria probar un poco de tu propia medicina?- y la mire a Jane esperando su aprobacion para actuar.

Con el asentimiento de Jane comence a pensar en que era lo que les podia haber hecho este mal vivente a las pobres niñas. Estas eran tratadas como basura y obligadas a tener sexo con cualquiera a cambio de nada por lo que decidi comenzar por lo basico.
Lentamente le quite los pantalones y tome su cinturon. Le di una nalgada en la pierna, algo suave para lo que vendria luego.
Esto te divierte ahora sangijuela maltida?- pregunte y volvi a pegarle.
En eso Jane corre el colchon y encuentra unas fotos de Dani. Me ira aumento conciderablemente, como era posible que pensara en utilizar a mi pequeña amiga. Esto ya era personal.
Asique se dedican a atrapar a las hibridas, acaso estas demente?- le susurre y volvi a pegarle- No sabes que ellas pueden matarte?, quien te da la orden de atraparlas? Habla si no quieres que te pegue en tu lugar sagrado- dije y mis ojos se ponian de color morado por la bronca.

Off: si piensas que me estoy zafando avisame, es que me imagino la trata de personas y esas cosas y me da bronca je. De ultima le damos otro rumbo.

El teléfono sonó cuando le estaba explicando todo a Maggie, por suerte el tipo ni siquiera comprendía lo que significaba para nosotros un "híbrido"... y su terror ante la situación era tal que tampoco le permitía reaccionar a nada.
Mire el número que me indicaba y mi ansiedad creció: era Danielle ¿cómo le decía que sospechaba de su padre?
―Hola Dani ¿estás ya aquí?... bien… nuestra pista es buena… quiero que me esperes en… ―me acerqué al gordo y lo desmayé de una trompada― perdón, es que no quería que cierta persona supiera donde estas.
Le dí la dirección y corté mientras le pedía a Maggie que llamara un taxi para llevarnos al tipo... si podía sacarle información no iba a perder la oportunidad.

La ira iba aumentando el volumen a medida que Jane me contaba lo del maldito Demetri. Como podía ser que no le importara absolutamente nada, eran sus hijos. Sabia que los de la guardia no tenian corazon, ni un minimo de sentimientos, pero era para tanto?. Al parecer era peor de lo que se esperaba.
Jane, quiero que acabemos con todo esto, estoy muy enojada y nunca lo hago- le dije furiosa.
En ese momento llego un mensaje de Dani, que al parecer ya estaba en Madrid y Jane sin pensarlo desmayo al gordo y me pidio que llamara a un taxi.
Asi lo hice mientras escuchaba lo que ellas hablaban. Un par de minutos despues la bocina del coche nos avisaba que podiamos salir del lugar. Cargamos al tipo al hombro y comenzamos a caminar. Era pesado, pero no para nosotras.

Ibamos en el taxi, tranquila al ver que el conductor ni siquiera nos miraba. El problema seria al llegar al hotel, pero como siempre Jane tenia la idea justa.
Me cargue al tipo al hombro y sin que me viera nadie, (nos venia muy bien que fueran las 4 de la madrugada y no hubiera gente en la calle) comence a ascender por las paredes subiendo de a un balcon. No sentia el peso del gordo, pero si memolestaba un poco ya que al estar inconciente se me resbalava y no podia sostenerlo del todo bien.
Mientras iba en direccion a la habitacion de Jane, de seguro en el vetibulo estaria Dani esperandola, como hariamos para contarle lo que sabiamos?, era una situacion un tanto complicada.
Llegue antes que ellas y coloque al sujeto en el piso a un lado de la ventana mientras las esperaba.

―Danielle, menos mal que ya estás aquí! Sube conmigo a la habitación.
Ni siquiera le presté atención al recepcionista, Maggie ya debía estar arriba con el tipo y si bien no dudaba en que ella podía mantener el control yo quería desentrañar la historia de una vez.
―Tengo unas sospechas nada buenas Danielle y a partir de ahora no quiero que te alejes de mi o de Maggie ¿has entendido?
Trataría de explicarle los pormenores más tarde, pero debía decirle lo básico para que no reaccionara mal por nuestro "secuestro express".
―Maggie si está por aquí, ya está arriba, con alguien que creemos "negoció" a la híbrida de la que te había hablado.

Miré a Danielle sin saber por donde empezar. ¿Cómo le decías a alguien que su propio padre estaba "limpiando" evidencias y que esa limpieza significaba su eliminación?
―Te lo explicaré todo Danielle, pero necesito que estemos tranquilas y juntas para eso, lo que sospecho no es muy agradable que digamos. Pasa... ―le dije golpeando la puerta de la habitación de Maggie, suponiendo que ella ya estaría dentro.

Me levante de golpe asustandome un poco al escuchar la puerta. En ese momento entraron Jane y Dani. Yo estaba recostada en la cama esperandolas pensando en lo extraño que habia sido todo y no las habia sentido llegar.
Hasta que llegaron- dije y me acerque a Dani- hola linda, como estas? que tal el vuelo?- le di un rapido abrazo y un beso en la mejilla.
Mi rostro mostraba frialdad y una seriedad que no iba con migo. Por lo general siempre sonreia y estaba alegre pero esta situacion me superaba y no podia controlarme.
A los pies de la cama estaba el gordo desagradable, aun inconciente. Espere a que las chicas hablaran, no sabia cual habia sido su conversacion antes de llegar aqui.